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Mostrando las entradas de julio, 2007

Bueno? Si, hola,Tengo algo muy importante que decir.

Algo se me perdio quise encontrarlo era algo asi como.. mmm olia rico olia como a ropa usada 2 dias era oscuro era gracioso era grosero Algo se me perdio me hace falta pero si lo encuentro me daña asi como una droga sabes? Medio salado el asunto medio revoltoso.

Pastas,sushi,duraznos y mucho, pero mucho cal c tose.

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Antes fui delgada, despues fui ''llenita'' (como sola me llamaba en mi afán de no llegar a lo que soy ahora), y hoy soy ''gordita'' por no querer despreciarme; decirme: Angie, eres obesa. No me importa como los demas se vean, solo me importa como yo me veo; suficientemente frustrada como para odiar cada centimetro de mi cuerpo, para oir mi propia voz emberrinchada porque no bajo de peso, porque me obsesiona la comida, porque no puedo estar 1 hora sin probar bocado, aunque sean las 4 de la mañana, e insuficientemente frustrada como para sentirme madura y ya muy grande para tener un desdorden alimenticio, alguna vez lo tuve pero como yo digo 'ya, no me vengas con pendejadas.', como para proponerme y cumplir, no comer demasiado, no comer todo el dia, no ingerir cada cosa que siquiera me haga agua la boca y solo comerlo, como para hacer ejercicio, como para dejar de lado la piel ya no firme, como para comer saludable, si, me gustan las verduras, me g

Lista imposible.

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Tratame con cuidado. Maltratame. Pégame. Estrújame. No me pellizques. No me muerdas fuerte. Jalame el cabello. No te midas demasiado. Ve television conmigo. No me aburras. Quedate dormido. Abrazame. Enojame. Hazme pedirte perdón. Enojate. Pintame las uñas. Alcoholizame. Alcoholizate. Hazme darte un masaje. Odiame. Molestame. Juega. Callame. Besame. Apriétame. Grita, pero no a mi. Come mas que yo. Ayudame a ser mejor. Huéleme. Sobre todo cuidame. ..Cuando me acuerde seguire con mi lista.

Una tarde fría de verano.

Como grandes y pequeñas polillas remolineandose dentro de mí gorgorea mi interior no puedo estar parada tengo que recostarme sobre esa cama Aguada La odio No puede ser menos acolchonada? No puede ser como una roca? Tendré que conformarme mis manos recostadas sobre mí y una alegre colcha verde me cubre me siento un feto pues estoy en su posicion Cierro los ojos, pido un té, o lo imagino Como lo tibio de una taza me reconforta la piel si la toca o moja mis labios si lo tomo. Respiro 1, 2, 3. Quizas oigo gritos de mamá Le grito aun mas fuerte que me deje en tranquilidad No le importa, a mi menos. Las mariposas revolotean como frente a un foco lleno de luz blanca como en un faro mariposas curiosas acercandose y quemandose en el intento cayendo por su inocencia sin conocer el mundo humano la maldad y la electricidad. Quiero que cesen de volar me lastiman siento algo dentro de mi y no es un hijo. Apago las luces y me acomodo mas con el cobertor verde asiento mi cabeza en una delgada almohad

Basta.

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Hay límites.

Barbi Angel & Angie Polilla.

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Enfocandome a este par: Nos conocimos Barbara Alvarez Martinez ( www.miaw-miaw.blogspot.com ), y Angelina Maria Jimenez Rodriguez (su servidora), en el Colegio Fray Pedro de Gante en 6to de primaria, un colegio lleno de esperanzas, de travesuras, de Choro-Burguer, y por sobre todo, de monjas . Conoci a su madre, tambien Angelina, porque le toco ser madrina de mi color amarillo en un encuentro con Cristo. Y mi mama la conocio en una junta de padres de familia por la edad, mi mama, siempre tan prudente. Ya adentrandonos en secundaria... Angie tenia su pegue, pero odiaba tenerlo, siempre con los feos y Barbi no era de cantidad, pero vaya que calidad agarraba!, aquellas tardes de Viernes en el Skate City , lidiando con nuestra amiga coqueta la Cervantes, con la maquina de baile y por si no lo recordabas, a mi me gustaba el que nos daba los patines, pero tenia como 18 años, y nosotras unas preadolescentes (casi lo olvidaba). Se nos aparecio el amor, un amor frustrado cada una por s

Largo y menospreciado.

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Pero que pensás al pensar que importaba!

Sancionando indiferentemente deliciosa.

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Leyendo. Una vez mas me doy cuenta que tendre que ahorrar tambien para otra cosa, muy importante: libros. Empiezo de nuevo por gusto, retomo la pasion que albergue por años reprimiendome. Pero ahora con mas realidad: los libros cuestan. Sanborns sera la hostia. Pf. Ahora abro un nuevo capitulo en mi vida que promete ser involvidable, barroco y a la vez imperfecto, no promete ser del todo duradero, asi que tal ves sea mas corto de lo esperado, asi que habre de disfrutar cada trozo de pulpa de vida que me regale el universo. No quiero sonar materialista (aún cuando sé que lo soy de cierta forma), pero cada día me enamoro mas de la ropa, de las cosas, y de los resultados que dan esos billetitos verdes que estan a punto de convertirse en unos billetes morados con mariposas, azules con sor juana, algunos rojos y brillantes, y no creo tener uno guinda, pero talves. Monedas antes raspadas y ahora con lineas para evitar fraudes. Como me gusta el dinero, no muero por el, pero me gusta, (debo c

No tengo adeudos con el IMSS.

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A veces quisiera quedarme en lo ambiguo. quiero abrir mi boca y tragarmelo todo todo sin pensar mas. Otra veces veo mis manos junto a las de mi madre y no quiero llegar ahi tanto sufrir tanto vivir. Me da miedo; me arreglo y me siento ya cansada, lista para morir aun sin haber vivido. No quiero morir no quiero saber que pasa en la vida habra de haber un habido control? Habre de aprender a vivir?

Aquella pupila brillante y vidriosa.

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Llegamos todas maquilladas muy maquilladas. Nos sentamos en un sillon en forma de media luna con los ojos brillantes llenos de miedo. Llego un señor no muy delgado, con bigote y me tomo de la mano. Me agarro suave y firme por la cintura y mi cara sonriendo y temblando de asco. Me llevó hacia las escaleras, pense subiríamos se percato que nadie observara y me llevo rápido hacia la puerta principal y me empujo con fuerza hacia afuera me tapó la boca me dijo que si sabía lo que me convenía me quedaría callada -que puede ser peor que esto?- pensaba y acepte ciegamente a todo lo que su voz ronca y desgastada me decían. Me agarró de mi cabeza y me metio rápidamente a la cajuela. Esa limosina era tan lujosa, llena de pantallas, y pieles. Pero la cajuela no era muy cómoda que digamos. Bah, comodidad, quien pensaría en comodidad en esos momentos. Golpes, moretones, se combinaban con mis esfuerzos por no llorar; con mis recuerdos vagos de como habia aquello sucedido. Estacionamiento sin segurid