Comida

Hoy me siento enojada y nadie sabe porqué.
Yo sí.
Hoy mi estómago recibió mucho más del alimento que deseaba y eso me enfurece conmigo; no del tipo de enfurecimiento enfermo-adolescente que quiere vomitar o al día siguiente matar de hambre a su cuerpo, sino del tipo obsesivo que se dice a sí mismo lo mal que estuvo de su parte no oponerse para seguir ingiriendo comida.

Ash, me da coraje mi falta de fuerza de voluntad.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Nervios de punta redonda

A lo Johnnie Walker.

Ya te leí